lunes, 11 de febrero de 2019

El Ramayana completo y digitalizado por primera vez

Se trata de una de las narraciones épicas más antiguas en sánscrito, considerada de los manuscritos más bellos de la India. El Ramayana (Viaje de Rama) es una epopeya de 24.000 versos, una de las más extensas, escrita en la India en torno al siglo III antes de nuestra era. Cuenta las aventuras del príncipe en su camino para rescatar a su amada.

Creada a mediados del siglo XVII expresamente para el Maharajá Jagat Singh I, soberano del reino del principado de Mewar (en Rajastán, en el noroeste de la India), la pieza de varios volúmenes es la más ilustrada de todas las ediciones que se conocen y contiene unas 450 pinturas.

Si bien está distribuida entre la Biblioteca Británica, tres instituciones indias y una colección privada, la Biblioteca Británica de Londres y el museo Chhatrapati Shivaji Maharaj Vastu Sangrahalaya (CSMVS) de Bombay trabajaron en colaboración para llevar a cabo la digitalización en alta resolución del Ramayana de Mewar.

Gracias a esta digitalización en alta definición, por primera vez desde hace casi 200 años se puede visualizar la obra por completo.

No se trata solamente de tener acceso a las imágenes sino que también se acompañan con texto traducido al inglés y archivos de audio para escuchar la narración.


El ‘Ramayana’, la epopeya escrita en torno al siglo III antes de nuestra era por el poeta y sabio indio Valmiki, narra las aventuras del príncipe Rama


Ataque de Rama y sus aliados contra Rávana, el demonio de diez cabezas que reina en Lanka y tiene cautiva a la mujer del héroe (©The British Library Board).


martes, 10 de marzo de 2015

Comentario sobre Viaje al centro de la tierra

Pasó mucho tiempo sin subir nada al blog. Mucho trabajo (editorial, por suerte) y poco tiempo, pero... siempre hay tiempo para leer.

En uno de mis últimos ratos libres, paseando por Avenida de Mayo, aproveché una oferta y compré tres libros: Los lanzallamas, de Roberto Arlt; El arte de la guerra, de Sun Tzu (este lo compré por curiosidad, por ver que lo mencionaban en las notas al pie de varios libros de Administración de Empresas, Recursos Humanos y de decisiones estratégicas) y Viaje al centro de la tierra, de Julio Verne.

¡Qué increíble nunca haber leído nada de Julio Verne! Todavía no lo puedo creer. Realmente me gustó mucho y tengo ganas de recuperar el tiempo perdido.

La edición que tengo de Viaje al centro de la tierra es de Terramar Ediciones, impresa en el 2008. Recuerdo que tuve que decidir entre la edición que compré y otra con una ilustración distinta en la tapa y con un papel de un matiz distinto. ¿Es posible que se trate de la misma edición? Esto me genera dudas. ¿Una misma edición puede tener distintas cubiertas? Mmm... lo dudo. Tal vez se trató de una reedición. Me queda de tarea averiguarlo.

En cuanto a la edición que tengo en mis manos, puedo decir que me gusta que se hayan incluido secciones que nos permiten (a los lectores) ubicarnos en el contexto de la historia y de la vida de Jules (llamémoslo por su nombre real; antes se castellanizaban todos los nombres, ya no).

Para los que recién conocemos el trabajo de Verne, es de ayuda contar con esa biografía del autor y con la explicación de la obra y su contexto. Sin embargo, no estoy del todo segura de si correspondía que esas secciones estuvieran ubicadas como páginas preliminares. Tal vez (por lo menos en mi opinión personal) hubiera sido mejor incluirlas como páginas finales, para poder conocer toda esa información luego de leer la obra.

Algo que me llama la atención es el tema de la traducción. ¿Por qué no está el nombre del traductor? Aunque la obra pase a dominio público deberíamos conocer el nombre del traductor. Realmente el trabajo de traducción de la obra es admirable y debe ser reconocido tanto como el del escritor. No por nada los traductores tienen sus propios derechos.

En cuanto al texto, veo que fue escaneado. De los mejores textos escaneados que vi hasta ahora, pero igualmente en algunas palabras se visualizan algunos errores, como por ejemplo que la letra m reemplaza a las letras r y n cuando están juntas (no está bueno que ese error se visualice en el nombre del autor).

También noté, y me extrañó, el hecho de que faltan signos de exclamación e interrogativos de apertura y que, incluso, los signos que se utilizan muchas veces no son lógicos. Puede ser que esos signos se encuentren en la obra original, pero no deja de llamarme la atención. Como correctora, hubiera consultado con el editor para corregirlo y utilizar los signos como corresponde en la puntuación en español.

Lamentablemente ya son varias las traducciones de los clásicos en las que encontré estas situaciones. Ojalá las editoriales comiencen a invertir en la revisión de textos escaneados. Los lectores son grandes detectores de errores.

Para terminar quiero comentar que considero que la encuadernación en binder fue apropiada para esta edición que no es muy extensa.

Disfruté muchísimo la historia de Axel y del profesor Lidenbrok, aunque tengo que aceptar que me da pena ver cómo quedó el libro después de haber sido sacado y metido de la cartera en cada viaje, cada espera y cada minuto libre, durante semana y media. Los próximos libros de Jules Verne que me compre van a tener el mismo destino.


viernes, 5 de diciembre de 2014

Comentario sobre Recetario amazónico de Dios


Si hay un libro de poemas del que me enamoré por su diseño general y su contenido principal, es este. Se trata de una nueva edición de Recetario amazónico de Dios. Veintiún poemas, de Nicomedes Suárez Araúz, editado por Editorial 3600.

La obra original contiene hermosos poemas sobre la Amazonia, escritos como recetas culinarias tradicionales. En la edición que adquirí en la FIL de La Paz, Bolivia, se intentó dar valor a la obra agregando ilustraciones de Lázaro de Ribera, un prólogo de Thiago de Mello (poeta brasileño) y una entrevista al autor publicada en el 2003 en la revista literaria The Bitter Oleander.

Como toda enamorada, no me importan los defectos que tiene, sigo eligiendo esta obra. Sin embargo, el blog es sobre contenidos editoriales, así que voy a mencionar los defectos (dos de los cuales surgieron al intentar hacerla más atractiva) y los detalles positivos que tiene el libro además de su contenido.

En primer lugar, la reseña de la contratapa es muy larga; detalla demasiado la forma en la que el autor se inspiró para escribir los poemas. Realmente considero que no es necesario incluir la historia; sí, es interesante pero para estar dentro del libro. De hecho, el autor la describe en la introducción, por lo que hay una redundancia de contenido. Hubiera sido bueno dejar solo los comentarios que autores reconocidos expresaron sobre Suárez Araúz. En lo personal, eliminaría la larga reseña y escribiría una en la que resaltáramos los poemas exclusivamente, junto a los comentarios acertados de los autores.

En segundo lugar, una de las falencias generales es el trabajo del diseñador. Desde mi punto de vista, la fuente elegida para los títulos no es la más acertada. Algunas mayúsculas parecen tener tildes que no deberían tener, lo que confunde la lectura. Y también se hace evidente que no se utilizó la herramienta de corte de palabra; podemos encontrar sílabas divididas en el prólogo de la primera edición, en los agradecimientos, en la entrevista y también en la biografía.

Otra falencia general es la corrección o su completa omisión. Simplemente parece no haber tenido lectura alguna. Los títulos de los poemas tienen mayúsculas que no corresponden y en las secciones que describo en el párrafo anterior faltan varios signos de puntuación, además del ya mencionado corte de palabras erróneo no detectado y, obviamente, no corregido. Es posible que el editor haya considerado que la traducción no necesitaba ser corregida. Grave error.

Y, como detalles menores, pero no invisibles, quedó una hoja en blanco al final de la obra y no se incluyó el colofón (aunque desconozco si en Bolivia es obligatorio incluirlo, o no).

Para equilibrar un poco la balanza, tengo que resaltar que, en lo que se refiere al objeto, es un libro delicado y hermoso. Una portada atractiva y sencilla, en tapa dura; encuadernación cosida y pegada con un pequeño detalle autóctono; páginas de guarda clásicas; una ilustración en lugar de una portadilla y también ilustraciones al iniciar y al terminar cada sección.

Creo que la intención de agregar valor a la obra era buena; sin embargo, esto no tiene sentido o pasa totalmente desapercibido si no hay un cuidado de la edición que abarque la obra en su totalidad.

Espero que en una próxima edición, en esta u otra editorial, se puedan corregir las falencias para que el lector pueda disfrutar del libro de principio a fin.

domingo, 30 de noviembre de 2014

Comentario sobre Aguafuertes porteñas

Si hay algo que es habitual en nuestro centro porteño es encontrar libros en oferta. Entre novelas y libros de autoayuda, encontré Aguafuertes porteñas, una recopilación de Roberto Arlt, de sus relatos publicados en el diario El mundo, en la década de 1930. Este ejemplar fue editado por la Editorial Cooperativa de Libreros (Edicol).

Los relatos me gustaron mucho, pero no soy crítica literaria, así que voy a mencionar solo tres puntos sobre esta “renovada edición” (tal como lo indica la misma editorial).

Primera observación: el prólogo es exactamente igual a la reseña de la contratapa. La reseña resalta la prosa y menciona la vigencia de los relatos de Arlt, la renovada edición y una breve biografía del autor. Bien, la única diferencia que se visualiza en el prólogo es que la biografía tiene otra variable tipográfica y más puntos y a parte.

Desde mi punto de vista, ante esta situación hay tres posibilidades. La primera y más sencilla es eliminar el prólogo. La segunda es lógicamente modificar los textos: que la biografía del autor fuera más breve en la contratapa y que en el prólogo se detalle más sobre los relatos y mucho más sobre la vida de Arlt. La tercera opción que daría más valor a la obra sería invitar a algún autor de renombre a que participe, realizando un prólogo para nuevos lectores. De cualquiera de las tres formas evitaríamos entrar en una redundancia de contenido.

Un segundo comentario es que a simple vista parece ser un texto escaneado que no tuvo revisión alguna. Hay errores como el signo ! en lugar de la letra l; comas o puntos en lugar de espacios; acentos increíbles...

El hecho de que sean escritos de un gran autor como lo era Roberto Arlt no significa que no debemos revisarlos y hacer las correcciones que correspondan. Es más, la obra se encuentra bajo dominio público desde el 1 de enero del 2013, por lo que se puede disponer de ella y realizar obras derivadas. En este caso, con la participación de un corrector el texto se hubiera lucido más y se evitaría que el lector tenga que “frenar” mientras lee.

Un último comentario sobre esta obra. Cambiar solo el diseño de la tapa solo es una pequeña diferencia con otras ediciones; sobre todo teniendo en cuenta que la obra, como indicaba anteriormente, es de dominio público. Justamente aprovechando esta situación, se debería evaluar cómo agregar valor a esos relatos.

Se me ocurre que se podrían incluir ilustraciones o fotografías de la época de 1930. Así como mencionaba al principio sobre invitar a autores para realizar el prólogo, se podría invitar a ilustradores a participar; o se podría recurrir a fotografías del Archivo General de la Nación.

Como reflexión, creo que como editores debemos buscar las oportunidades que nos da un libro de dominio público. En estas situaciones, los lectores tienen la posibilidad de leer la obra en Internet de forma gratuita, por lo que debemos darles algo extra, ya sea en formato impreso o digital.

domingo, 14 de septiembre de 2014

Experiencia editorial en La Paz


La vida tiene raras casualidades. Una de ellas fue que la Feria Internacional del Libro de La Paz me encontrara justamente en esa ciudad. Solo bastó escuchar la publicidad para comprometerme a pasar, aunque más no sea por una hora.

Es imposible no comparar esta feria con la de Buenos Aires. Pero tampoco conozco otras (me perdí la de Guadalajara por unas semanas), así que trataré de limitarme a describirla y comentar sobre los libros que compré.

La FIL de La Paz se llevó a cabo en una de las plantas del nuevo Centro de Exposiciones de La Paz "Chuquiago Marka", del 30 de julio al 10 de agosto (2014). Sinceramente esperaba encontrar más stands, teniendo en cuenta que había stands oficiales como el del país invitado, Uruguay, el de la embajada argentina, el de la alcaldía, entre otros.


También llamó mi atención el hecho de que los stands orientados al público infantil no estuvieran en un sector específico. Sin embargo, observando esto llegué al stand que me sorprendería totalmente: el del Ministerio de Comunicaciones del Estado Plurinacional. Mi sorpresa no solo se da porque estaba orientado al público infantil sino porque se vendían libros aparentemente biográficos del presidente Morales. Uno de esos libros se titulaba Evo y el sueño de volar. Con la intención de no participar en ese tipo de captación no compré el libro, pero hoy me arrepiento ya que es un material que abriría el debate en cualquier parte del mundo.



Contrariamente, me sorprendió para bien encontrar un stand dedicado a una saga infantojuvenil boliviana: Benjamín. Tuve el gusto de poder charlar con su autora, María Sarah Mansilla (otra linda casualidad que seamos tocayas). Estoy segura de que, en nuestra breve, pero cálida conversación, ambas nos nutrimos de atractivos conocimientos en lo que a la edición se refiere. Me comprometí a darle mi opinión sobre la última de las obras, Benjamín en Santo Corazón, y ya terminé de leerla por lo que en breve me pondré en contacto con Mansilla.


Siguiendo con las ediciones para el público infantojuvenil, en un stand de liquidaciones, encontré un libro que obtuvo el premio de literatura infantil ENKA de Colombia en el año 1998: La pluma de Miguel. La reseña atractiva y el anuncio "sexta edición" me convencieron de llevar el libro, pero fue el enterarme de que algunos maestros han utilizado esta obra en sus clases lo que despertó mi curiosidad. Este libro está en el segundo lugar en la fila de "libros por leer" de mi biblioteca.


Otro hallazgo fue la colección Baño mágico, orientada a los más pequeños de la familia y tratando de que los libros formen parte de sus vidas desde temprana edad. En estos libros podemos ver a los personajes en blanco, pero inmediatamente al estar en contacto con el agua se visualizarán los colores de cada uno de ellos; al secarse vuelven a estar en blanco. No sé si estos libros-juguete ya estaban en el comercio editorial de nuestro país porque no tuve la oportunidad de ir a las últimas ferias del libro infantil, pero me pareció un material que tenía que traerme.


A esta lista se sumaron Recetario amazónico de Dios, de Nicomedes Suárez Araúz, y La Interculturalidad como herramienta de emancipación. Hacia una redefinifición de la Interculturalidad y de sus usos estatales, de Jorge Viaña Uzieda. El primero está compuesto por 21 poemas sobre la región amazónica y su historia, escritos como clásicas recetas de cocina, junto con una entrevista a su autor. El segundo está basado en un proyecto de investigación, editado por el Instituto Internacional de Integración del Convenio Andrés Bello, en mi opinión, con un diseño de tapa muy distintivo y atractivo.


Pero no solo en la FIL hay libros. En el Museo Nacional de Etnografía y Folklore pude deleitarme descubriendo hermosas obras editadas por la propia institución. Una de ellas es Rostros andinos, un libro fotográfico con una mirada antropológica de la comunidad boliviana. Otra es Los diversos rostros del alma, basado en la exposición permanente de las máscaras que se utilizan en los bailes folclóricos del país andino. Y la tercera, 50 años. 1962-2012, hace un repaso de la historia del museo y de las exposiciones que se organizaron en él.





Más allá de estos hallazgos, siento que este país culturalmente único todavía tiene mucho camino editorial por recorrer. Esta opinión no surge solo de asistir a la FIL de La Paz, si no de haber recorrido varias ciudades y no encontrar librerías generales, tan comunes en Argentina; de haber leído ya un par de libros editados en Bolivia sin un correcto "cuidado de la edición"; de notar la necesidad de un editor en carteles informativos en museos e instituciones públicas; de no ver lectores inmersos en alguna obra.

Seguramente esto sucede también en muchos otros países o regiones. En mi viaje por el altiplano también fui por una región de Perú y noté la misma falencia que describo en esta nota, pero publico mi opinión solo sobre Bolivia, con mucho respeto, por haber pasado más tiempo allá y por un interés sincero en el futuro editorial de un país que amo, por ser el de mi familia.

Ojalá que en el corto plazo Bolvia se desarrolle en el ámbito editorial tal como lo viene haciendo en otros ámbitos: con fuerza y orgullo.

domingo, 22 de junio de 2014

Roberto Dosil en Filo

Intro

Después de varios meses sin ir a la facultad, el 6 de junio tuve la oportunidad de presenciar una charla del ciclo “Cartografías del Diseño y la Edición”, organizado por la cátedra de Fundamentos de Diseño Gráfico para Editores y con el apoyo de la Secretaría de Transferencia. En esta oportunidad, se presentó "Editar es Diseñar. Diseñar es editar. Experiencias entre el diseño y la edición", a cargo de Roberto Dosil, diseñador y editor, profesor de la maestría de Publishing en la Universidad Simón Frazer, de Vancouver Canadá. Dosil es socio-fundador de Stanton Atkins & Dosil (2002), una editorial con base en Vancouver British Columbia dedicada a la publicación de historia canadiense. Hoy se dedica de lleno al trabajo de edición y de enseñanza.

Consejos de un experto

Desde su experiencia en la edición, Dosil nos propone formularnos preguntas iniciales básicas, por ejemplo, sobre el tema de la obra y si hay publicaciones similares. Asimismo, nos sugiere realizar una sinopsis del libro en la que se comunique su intención y sirva para que el escritor pueda llevar a cabo su tarea. Debemos informarle a este el objetivo específico para la narrativa central. Los textos de los segmentos auxiliares sumarán otro tipo de información.

Si bien estos consejos son útiles, paso a detallar consejos relacionados con el diseño, ámbito en el que Dosil se especializa. Uno de estos es tratar que las imágenes creen un contexto y que se vinculen con la historia principal; el diseño debe volverse invisible, familiar, para reinterpretar la historia del texto y hacerlo accesible al lector. En consecuencia, es imprescindible reducir el exceso de elementos, eliminar y limpiar la página hasta que visualicemos que el lector puede acceder al texto y a la imagen sin "fisuras". Es decir que el diseño debe facilitar la lectura.

Otro consejo se refiere a la visión global de todo el diseño para ver el ritmo del libro. Para esto es útil la impresión de todas las páginas en miniaturas (desde los programas de diseño se pueden configurar este tipo de impresiones), para corroborar la familiaridad y la sorpresa en el lector.

También compartió su experiencia como fotógrafo e indicó que se pueden incluir imágenes en las que el protagonista no es el tema del libro, pero que, directa o indirectamente, pueden estar conectadas y remitirnos a la historia que estemos contando. Ya sea a través de imágenes que comunican anécdotas o que muestran elementos muy ligados al tema, estas pueden ilustrar muy bien el libro y acompañar a los lectores en su recorrido por las páginas.

Formato y cuadrícula

Dosil remarca una de las claves que todo diseñador y editor deben saber: la cuadrícula debe asistir y marcarnos un orden, pero al mismo tiempo ser flexible y dinámica; se debe interpretar. De esta manera, sugiere confeccionarlas con un número impar de módulos (columnas en la cuadrilla) para poder jugar con el diseño. Así, siempre queda un módulo extra para permitir variaciones al diseñar las columnas para el texto y los espacios para el diseño general de las páginas.

También es indispensable explorar con distintas fuentes, teniendo en cuenta que el promedio de caracteres por línea para un buen seguimiento es 65 y que, para asistir a la lectura, se recomienda elegir una fuente con serif para los textos narrativos.

Es viable usar para toda la obra una única fuente que tenga todas las variables como las Open types que ofrecen variedad de peso, bastardilla, Small Caps, OldStyle, entre otras. Sin embargo, hay muchas fuentes que no las tienen y seleccionar una de estas para usar herramientas de, por ejemplo, InDesign para simular las variables faltantes sería un grave error.

Para obras en las que se van a usar imágenes lo mejor es crear una línea de horizonte visible en ellas y en el espacio del texto, que permanezca a lo largo de todo el libro.

Una aclaración importante que Dosil hizo (por lo menos para mí) es que, si bien tenemos una cuadrícula que respetar, las imágenes no necesariamente tienen que ocupar por completo los módulos establecidos, pero sí tienen que estar equilibradas con los textos y con cualquier texto adicional. El uso de imágenes a doble página genera recreos visuales después de textos densos, por lo que también se debería tener presente a la hora de crear la plantilla. En estos casos, y siempre que tengamos imágenes que se dividan en el lomo, debemos prestar atención y probar cómo quedarían plegadas en el cuerpo del libro. Debemos asegurarnos de que, al momento de insertar la imagen en la plantilla, el punto óptico de la imagen no se vea afectado por esta división.

Comentarios generales

En su editorial usualmente realizan una primera edición en tapa dura y luego una segunda en tapa blanda, y con las correcciones de los errores que se detectaron en la edición anterior. En lo que respecta al diseño de las cubiertas, nos confirmó que mantener una consistencia en el de varios libros similares era un beneficio a la hora de ofrecerlos a las librerías.

Por otra parte, en cuanto al tema de las alineaciones de texto, hubo un pequeño debate respecto al uso del justificado. Si bien a muchos nos parece que "justificando" el texto se ordena o se visualiza mejor, Dosil afirmó que esta acción destruye la relación de la interletra y de la interpalabra, y que suelen quedar las llamadas "lagunas" o los "ríos". Como beneficio, el deflecado ayuda a identificar dónde se estaba leyendo; permite realizar una lectura natural.

Continuando con los consejos para el diseño tipográfico del texto, Dosil nos indica que los cambios de tópicos dentro de la narrativa se deben identificar de alguna manera, por ejemplo, con la variable Small Caps. Siempre que usemos esta variable debemos utilizar 20 de tracking para que sea legible.
También nos demostró con ejemplos que se pueden crear líneas del horizonte con el texto y con los puntos ópticos de las fotografías seleccionadas. En cuanto a esto último, debemos tener presente que lo importante estará debajo de esa línea. Otro consejo que nos brindó fue que, cuando tengamos que incluir textos adicionales, como por ejemplo epígrafes, la tipografía debería ser un punto menor al texto central. Al respecto, los epígrafes deben complementar las imágenes, no describirlas y no necesariamente tienen que estar próximos a las imágenes; debemos probar las posibilidades que la plantilla nos dé y lo que ayudaría a la lectura.

Por otra parte, Dosil nos propone utilizar imágenes en las que el objeto fotografiado no se vea como algo plano o sin vida. Por ejemplo, si tenemos que hacer referencia a un libro, no mostremos una tapa plana sino el libro.

Otra de sus sugerencias fue aprovechar el espacio de la portadilla, ya que su existencia no tiene importancia editorial (se trata de una costumbre adoptada de las primeras épocas de la imprenta, cuando la agregaban para identificar los manuscritos) y es redundante. En lugar de eso podemos dar lugar a una imagen introductoria al libro.

Como últimos comentarios que considero importantes, resaltó la efectividad de las tipografías Milo, Miller y, especialmente, Warnock de Roger Simbach, y que la tipografía Bodoni no beneficia la lectura por el contraste entre los bastones de las letras.

Y para finalizar, cito el consejo más importante que nos dio (el mismo que él había recibido de parte de un colega, al comienzo de su carrera profesional): "Siempre hacé lo mejor para el libro".

sábado, 14 de junio de 2014

Original mundialista

Y a tono con el mundial y el partido de Argentina de mañana, me tomo el atrevimiento de subir este original realizado para un trabajo practico de la facultad, cuyo objetivo era crear un original de un capítulo orientado a explicar a turistas lo que significa la cultura del fútbol para los argentinos.

Lo subo no solo por eso sino también porque es la versión corregida, y me siento satisfecha con el producto final.

<título de capítulo> Locos por el fútbol
<copete> Conocido también como "soccer", el fútbol es el deporte que atrae a millones de argentinos y genera pasiones.
<fotografía de tribuna argentina durante un partido a estadio completo, en la que se vean bien los colores celeste y blanco, la alegría de la gente, globos, papelitos y banderas> <se adjunta modelo>
<imagen 1 sin epígrafe>

<subtítulo> Fútbol para todos
<texto principal> Este deporte inglés, en el que dos equipos compiten por anotar tantos (goles) con un balón en el arco contrario sin usar los brazos, llegó al país con la inmigración inglesa del siglo XIX. Fue adoptado rápidamente por la población argentina, y su práctica, transmitida por generaciones. Actualmente personas de todas las edades y clases sociales se reúnen para ver un partido.
También es una forma de generar o mejorar vínculos sociales. Por ello, se organizan campeonatos en escuelas, trabajos y barrios, para transmitir valores como el trabajo en equipo y el compañerismo. En cuanto a las ligas profesionales, es tanta la pasión que genera que, durante un partido, puede dividir familias si sus integrantes son de clubes rivales.
Pero lo que también identifica al fútbol argentino es el espectáculo antes, durante y después de cada partido.

<fotografía jóvenes de clases sociales bajas jugando al fútbol en un ámbito precario o rural al aire libre, con pelotas, arcos y canchas improvisadas> <se adjunta modelo>
<imagen 2>
<epígrafe> Es común que se jueguen partidos en espacios precarios o "potreros".

<subtítulo> Cada partido, una fiesta
<texto principal> Parte de la cultura argentina es la alegría con que se acompaña a un equipo. Los "hinchas" (fanáticos) van al estadio con camisetas y banderas de su equipo y con bombos (instrumento de percusión). Papeles, globos y cantos (alentadores o agresivos) hacen que el partido se viva como una fiesta deportiva para hombres, mujeres y niños.
Sin embargo, el resultado determina los ánimos de ese día y los siguientes. Si se trata de partidos clásicos (entre clubes históricamente oponentes, como Boca Junior y River Plate), es casi una tradición que el vencedor ridiculice a su rival mediante afiches (impresos pegados en las calles).
Durante los mundiales los colores de la bandera nacional invaden espacios privados y públicos. En estos últimos, pantallas gigantes permiten a todos disfrutar del partido. Los jugadores también despiertan orgullos y pasiones. Diego Maradona y Lionel Messi, por ejemplo, íconos del fútbol argentino, tienen millones de fanáticos y son noticia incluso fuera de su ámbito profesional. Pero el fútbol es más que un espectáculo; es parte de la vida diaria.

<imagen de un afiche que un equipo haya dedicado a su rival, preferentemente entre clubes rivales clásicos; fácil de comprender, cuyo mensaje sea breve pero no agresivo> <se adjunta modelo>
<imagen 3>
<epígrafe> Afiche que el Club Atlético Independiente dedicó a su rival, Club Atlético Racing, ambos de Avellaneda, Gran Buenos Aires.

<fotografía en la que se visualicen los festejos de un equipo local con el Obelisco de fondo; debe poder verse la multitud de hinchas de equipos con colores vivos; preferentemente no celeste y blanco ya que la fotografía central sugerida ya posee esos colores y sería repetitivo> <se adjunta modelo>
<imagen 4>
<epígrafe> Un lugar simbólico de festejo es el Obelisco, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

<subtítulo> Fútbol día a día
<texto principal>
La pasión futbolera también está en la literatura e historietas. Alberto Fontanarrosa, reconocido escritor, humorista y dibujante argentino, publicó varias obras sobre esta temática, y "Clemente", personaje de historieta creado por Caloi, famoso dibujante argentino, se convirtió en ícono representativo del mundial de 1978.
Bandas del rock nacional se inspiran en el sentimiento por el fútbol, como Bersuit Vergarabat con "Toco y me voy".
Este deporte fue tema principal en El secreto de sus ojos, ganadora del Oscar a mejor película extranjera, del director Juan José Campanella; y parte del contexto de "Son amores", comedia de televisión.
El fútbol invade también publicaciones periódicas, impresas o digitales (blogs, páginas, foros, redes sociales).
Pero las favoritas son las publicidades, que representan, en pocos minutos, lo que los argentinos sienten por el fútbol: pasión.

<ilustración del personaje "Canaya" que Roberto Fontanarrosa creó a pedido de las autoridades del Club Atlético Rosario Central, preferentemente con un color de fondo para que se distinga y no se pierda en el texto; los colores vivos de la camiseta del personaje deben visualizarse correctamente> <se adjunta modelo>
<imagen 5>
<epígrafe> Canaya, creado por Roberto Fontanarrosa, humorista, dibujante, escritor popular e hincha del Club Atlético Rosario Central. <en recuadro>

<subtítulo> Cronología
<fotografía antigua de alguno de los edificios de las asociaciones que surgieron para reglamentar el fútbol para representar los orígenes del deporte futbolístico (VER IMÁGENES DE LA BIBLIOTECA DEL FÚTBOL ARGENTINO EN http://www.afa.org.ar/)> <se adjunta modelo>
<imagen 6>
<epígrafe> 21 de febrero de 1893. Se funda la Argentine Association Football League (actualmente Asociación de Fútbol Argentino) para profesionalizar el deporte.
<fotografía del partido de Argentina contra Holanda en el momento del gol o el festejo durante la final o la entrega de la copa del Campeonato Mundial Argentina 1978; dado que las fotos eran en blanco y negro, deben distinguirse bien las líneas verticales de las camisetas que distinguen a los jugadores argentinos; también deben verse los característicos papelitos que representan el festejo de las tribunas (VER FOTOS OFICIALES DE LA FIFA CORRESPONDIENTES AL MUNDIAL DE 1978 DESDE http://es.fifa.com/worldcup/archive/index.html)> <se adjunta modelo>
<imagen 7>
<epígrafe> 25 de junio de 1978. La selección argentina, anfitriona del Campeonato Mundial, gana la final contra Holanda.
<fotografía de Diego Armando Maradona besando la copa mundial o festejando con el resto del equipo en el estadio Azteca de México, durante el mundial de 1986; existen fotografías en blanco y negro de ese campeonato pero priorizar las fotografías a color en las que se distingan los colores celeste y blanco de las camisetas y el dorado de la copa; también debe transmitir la emoción de haber ganado el campeonato y, de ser posible, que se visualicen las tribunas del estadio mexicano (VER FOTOS OFICIALES DE LA FIFA CORRESPONDIENTES AL MUNDIAL DE 1986 DESDE http://es.fifa.com/worldcup/archive/index.html)> <se adjunta modelo>
<imagen 8>
<epígrafe> 29 de junio de 1986. Con Maradona como capitán, Argentina gana su segunda copa mundial, en México.
<fotografía de Marcelo Bielsa, reconocido actualmente por ser director técnico del Athletic de Bilbao, festejando con el resto del equipo la victoria en los Juegos Olímpicos organizados en Atenas en el año 2004; la fotografía debe transmitir la emoción de haber ganado el partido o la medalla de oro ya que es la primera obtenida por la Argentina en la categoría fútbol masculino> <se adjunta modelo>
<imagen 9>
<epígrafe> 28 de agosto de 2004. La selección masculina, dirigida por Marcelo Bielsa, gana su primera medalla de oro olímpica en Atenas. <foto de las olimpíadas>